Las nuevas generaciones que se acercan a la literatura, tanto como lectores y autores, han imprimido una revolución al arte literario: ninguno de ellos concibe que sus autores preferidos no estén en redes sociales, sobre todo aquellas como Wattpad directamente relacionadas con la literatura

Tras la celebración de una nueva edición del Día del Libro, sobre todo en literatura juvenil se define una tendencia donde los lectores jóvenes demandan conocer a sus autores preferidos y poder interactuar con ello en redes sociales.

En el caso de la Feria del Libro de Valencia, su desarrollo es similar a las que se desarrollan en diversas ciudades españolas: colas antes de que se abran las casetas para lograr el ansiado ejemplar firmado por el autor.

Para que una Feria del Libro tenga éxito, la fórmula no es demasiado complicada: acertar con la oferta, programar múltiples actividades que tengan que ver con el mundo del libro y buen tiempo.

Una feria multitudinaria en Valencia

En la edición de este año, celebrada como en año anteriores en el Jardín de Viveros, más de un millón de personas se han acercado a las casetas este año.

Además, a la asistencia multitudinaria de público, se han sumado unas ventas millonarias, muy ligadas al fenómeno fan.

Son sobre todo los jóvenes, donde triunfa por derecho propio la novela romántica, los que se movilizan para poder conocer, en carne y hueso, a sus autores preferidos.

A eso va unido que, en las cohortes de edad, son los jóvenes entre los 14 y los 24 años los que más leen en España…y también los que más compran libros, en un sector que no vive sus mejores días.

En la edición de este año ha brillado con luz propia la autora Megan Maxwell, una autora habitual en el top de las novelas románticas: el pasado viernes la organización se las vio y se las deseó para controlar la marabunta humana que quería un ejemplar firmado por la novelista nacida en Núremberg.

Escritores de la Generación Z

Con unas edades que superan por poco la veintena, no es extraña la existencia de escritores que han labrado su incipiente carrera literaria a golpe de red social.

Un claro ejemplo es Inma Rubiales, una extremeña de tan solo 22 años, cuya primera novela Hasta que nos quedemos sin estrellas, antes de aparecer como libro tuvo un gran éxito en la red social Wattpad.

El pasado año publicó El arte de ser nosotros, y compatibiliza la escritura con sus estudios de Publicidad y Relaciones Públicas.

Además, la producción de estos jóvenes escritores es lo que podríamos calificar como 360º, ya que no se conforman con un libro impreso, sino que también suelen hacer adaptaciones para audiolibros.

Otro de los jóvenes literatos de esta generación es Ramón Gener, que el día de San Jordi de este año logró vender 31.877 ejemplares de su novela Historia de un piano; de hecho, ha sido tal el éxito que su editorial se ha quedado sin ejemplares de libro y se plantea de urgencia una reedición.

No solo pantallas

Algo que ha sorprendido a la dirección de la Feria del Libro de Valencia es que de unos años a esta parte son lectores muy jóvenes los que con esas ansias que solo se tienen en la adolescencia y la juventud, casi toman por asalto las casetas para poder interactuar con sus autores preferidos.

También sorprende que estos jóvenes lectores prefieren el libro físico antes que la versión digital; esto rompe ciertos clichés como que todos los jóvenes lo único que entienden es tener un dispositivo electrónico con una pantalla delante.

Hacer frente una quincena donde el libro adquiere carta de naturaleza en Valencia es un proceso que a la organización le lleva casi un año de trabajo, por lo que será dentro de poco cuando los organizadores comiencen a preparar la edición del 2025.

Un erial, salvo contadas excepciones

A pesar del éxito de la Feria del Libro de Valencia y las que se celebran en otras ciudades españolas, los índices de lectura, según el informe que elabora todos los años el Ministerio de Cultura, no deja de bajar.

El número de españoles que no leen nada en todo el año ha aumentado siete décimas, pasando del 35,2% al 35,9%, según el Barómetro de Hábitos de Lectura y Compra de Libros del año 2023.

Como todo no podía ser malas noticias, un 52% de la población lee al menos una vez por semana.

Otro indicador más, las personas que leen por ocio han pasado del 64,8% – datos del 2022 – al 64,1%, lo que implica perder en un año siete décimas.

Entre las razones que aducen muchos de los que no leen, se encuentra como principal argumento la falta de tiempo para no disfrutar con la lectura.

Los españoles prefieren realizar otras actividades en su tiempo libre, antes de leer: aducen razones como pasear, hacer deporte, descansar u otro tipo de pasatiempos.

Otro «culpable» de la ciudadanía no lea la tienen diversos tipos de actividades de ocio que se desarrollan delante de una pantalla: internet, redes sociales, series en plataformas de streaming y más.

¡Me cuentas lees un cuento!

Los más pequeños son, por ellos mismo o de forma vicaria, los que más leen con diferencia: al 76,3% de los niños y niñas leen acompañados de sus padres y entre los 6 y los 9 años el 86% de los niños leen.

Posteriormente, en el tramo de 10 a 14 años, también es mayoritaria la lectura como fuente de ocio, ya que el 85,7% de los niños dicen leer, sobre todo cuentos y los más mayores, literatura juvenil.

Sin embargo, a medida que los niños y las niñas van entrado en la adolescencia, muchos de ellos abandonan la lectura como fuente de ocio, prefiriendo otras actividades como pueda ser estar pegados al móvil.

Por comunidades autónomas

La lectura tampoco es homogénea desde el punto de vista demográfico. Las comunidades autónomas que leen más de la media son Madrid, Catalunya, Navarra, País Vasco, La Rioja y Aragón.

Las comunidades autónomas por debajo de la media son Extremadura, Canarias, Castilla – La Mancha, Andalucía, Murcia y Galicia.

Con estos datos las instituciones, desde la General del Estado hasta las locales, se debieran embarcar en una Cruzada por lograr que la ciudadanía lea más.

Tal como decía Benjamín Franklin, científico e inventor estadounidense, “Gastar dinero en libros es una inversión que rinde buen interés”.

Fuente – EL PAÍS / Wikipedia / Planeta de Libros / el diario

Imagen – manuel m. v. / Antonio Marín Segovia / Susan Ruggles / Christian Jensen / Conor Lawless / David Masters / Eneko Muiño