Milice Française de la mano de Romain Slocombe

Nueva entrega de las peripecias, y ya vamos por una tetralogía del inspector León Sardoski, un fantoche fascista que trabaja para la policía del régimen colaboracionista de Vichy y que disfruta deteniendo judíos. En este volumen seremos testigos de la colaboración de la policía francesa con la Gestapo de la liberación de París

Su nombre es inspector León Sadorski, el personaje que ya ha protagonizado una trilogía, de color negro como corresponde a los colaboracionistas franceses con el nazismo, de la mano de escritor Romain Slocombe.

Estamos en el año 1942, con la II Guerra Mundial ya mediada, y la mitad de Francia está bajo la ocupación militar alemana, y la otra mitad bajo los dictados del gobierno colaboracionista de Vichy, que lidera el Mariscal Pétain.

Nuestro protagonista es un policía del Régimen de Vichy que persigue judíos por obligación, pertenece a la siniestra «sección judía», y también por devoción, ya que es un profundo antisemita.

A aquellos judíos que no pueden evitar la detención pagándole una «mordida», los lleva detenidos a Drancy, lo que ya en aquella época se conocía como la antecámara del grupo de campos de concentración de Auschwitz.

Un tupido velo de olvido

Ahora que se celebra el 75 aniversario de la liberación, a manos de las tropas soviéticas, del grupo de campos de Auschwitz, Romain Slocombe, en su trilogía protagonizada por el siniestro policía, nos habla de un pasado poco halagüeño para Francia y algunos franceses.

Estamos hablando de la colaboración con el régimen nazi de Adolf Hitler y sus secuaces, una de cuyas excrecencias fue la creación de la Milicia Francesa (Milice Française), un ejército que aliviaba la carga de trabajo de las SS, luchando contra la Resistencia.

Ni que decir tiene que muchos de los hijos y los nietos de los colaboracionistas de aquella época son las huestes con las que Marie Le Pen y su Reagrupamiento Nacional, producto de «blanquear» el Frente Nacional, piensa conquistar El Eliseo.

Un fantoche fascista

El Inspector León Sadorski, y son palabras del propio autor, es horrible y un hijo de puta (sic.), y por si fuera poco también es un machista y un obseso sexual, pero no por ello deja de ser un espécimen tremendamente humano.

Además, como la mayor parte de los que habitamos este mundo, tiene profundas contradicciones, y quizás la más evidente es que, llegado el momento, decide esconder en su propia casa a una adolescente judía a la que el mismo debiera de perseguir.

Los hechos suceden en una de las mayores redadas que contra población judía llevaron a cabo las estructuras represivas del régimen colaboracionista en la infausta redada de Vel d’Hiv en el año 1942.

En solo dos días ,16 y 17 de julio de 1.942, fueron detenidos y deportados 13.000 franceses de ascendencia judía, todos ellos detenidos por la policía francesa bajo las órdenes del siniestro René Bousquet.

Ni mucho menos un monstruo

Pero la caracterización que hace Romain Slocombe del policía Sadorski no es la de un monstruo, sino más bien la de un personaje ambivalente, tal como lo demuestra que deje de un lado la obligación profesional y acoja en su casa a una vecina judía adolescente.

El autor tampoco aclara a ciencia cierta por qué tiene ese gesto de ¿humanidad? Puede ser por lascivia, también como una manera de tener un «seguro» en caso de que se produzca la posible claudicación del Eje frente a una hipotética victoria de los Aliados.

Sadorski tampoco es un nazi, de hecho, a lo largo de las tres novelas se puede percibir la inquina que tiene a los ocupantes, pero si es un amante del orden, procedente de una pequeña burguesía arribista y acomodaticia.

De hecho, de ese jaez era muchos de los alemanes y alemanas que, en el año 1933, recordemos que, en unas elecciones democráticas, dieron el gobierno al canciller Hitler, que en poco tiempo acabó con cualquier resto de oposición política y fundó el III Reich.

Una trilogía, que dejará de serlo bien pronto

Como ya hemos indicado, al menos por ahora, el truculento Inspector Sadorski ha protagonizado tres novelas, y parece que Romain Slocombe volverá a servirse del policía de Vichy para idear nuevas aventuras.

Fue en el año 2017 cuando apareció L’étoile jaune de l’inspecteur Sadorski que publicada por el sello editorial galo Robert Laffont todavía no ha encontrado un sello español que lo traduzca al idioma de Cervantes.

El próximo volumen, el cuarto, avisa Slocombe, aparecerá en octubre, y se centrará en la colaboración de la policía de Vichy con la Gestapo y culminará con la liberación de París por las tropas aliadas.

No está mal recordar que como parte de las primeras tropas que entran, además como fuerza de choque, para liberar París se encontraba la que la historia ha recordado como «la nueve», la novena compañía de la División Leclerc, formada íntegramente por republicanos españoles.

Una relación de amor – odio con los lectores

Pero es precisamente la antipatía que provoca en los lectores las actividades y opiniones extremas del Inspector Sadorski la que lo ha convertido en un «gancho» que hace crecer como la espuma las ventas de la hasta ahora trilogía.

Se trata una relación de amor – odio que va macerando a fuego lento, ya que ninguna de las tres novelas, y mucho menos la que verá la luz en octubre, baja de las 400 páginas, con lo cual la sensación de echar de menos nuevas aventuras de Sadorski se acrecienta.

Además, el escritor galo ha roto con sus novelas una ley no escrita que dice que siempre el héroe, en las novelas situadas en la ocupación alemana en la Francia de la II Guerra Mundial, tiene que ser un resistente o una mujer judía.

Hasta ahora a lo máximo que se había llegado, y hablamos de las novelas de Phillip Kerr, es que el protagonista fuera un personaje ambiguo, como es el caso del policía alemán Bernhard Gunther.

Pero Romain Slocombe quería ir mucho más allá, romper un tabú con un personaje que pudiera ser calificado de malo sin ambages, y podemos decir que lo ha conseguido plenamente.

Fuente – EL PAÍS / Milicia Francesa en Wikipedia / Cultura en EL PAÍS

Imagen – Alonso de Mendoza / Jason M. Ramos / BarchBot / Wolfmann / Babelio / Pierre Corbucci

Deja una respuesta

Por favor, inicia sesión con uno de estos métodos para publicar tu comentario:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Imagen de Twitter

Estás comentando usando tu cuenta de Twitter. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.